El alma y la ciencia III

PARTE III

Fueron pasando os días y la amistad entre ambos crecía, crecía también la confianza, y conversaban al terminar del día, en la salida.
De muchos asuntos, nunca privados… Ella era conciente de aquello que sentía y a pesar de todo sentía un gran respeto admiración y cariño! jamás se denunciaría guardaría en el silencio de su amargura aquello que día a día crecía dentro de ella que la tornaba inmensamente feliz! Mientras el conversaba sobre el libro o la materia dada, ella le miraba a los ojos y le gritaba Te amo… Será que alguna vez escucharas mi corazón? Pensaba ella!
El sábado en la tarde ella estaba Online cuando lo vio entrar! … Unos segundos después se vio en su pantalla una ventana abierta color naranja que ella abrió desesperadamente…
- Hola! Estas aquí un sábado Sola? No tienes nada que hacer!?
- Hola! respondió ella! Y pensó! Estoy siempre sola! Que mas da!
- No, ahora estoy con usted…
- Hasta cuando me trataras por usted me haces sentir como un viejo! No somos amigos? Somos de la misma edad!...
- Es muy difícil para mí, es una cuestión de respeto. Le pido Disculpas…
A pesar de toda la distancia que mantenían, detrás de la pantalla y el teclado eran unos buenos amigos y ella a pesar de el sentimiento oculto, guardaba muchos sentimientos que solo a través de ese medio pudo exprimir, al contarle como era infeliz, como se sentía frustrada, como los años le iban pasando por ella y no le dejaban rastro! Le contara todas las veces que sufrió desengaños, tristezas amarguras e infelicidades, si algunas vez ella fue feliz! Ese tiempo ya pasará… el leía y callaba! En lo más profundo de su ser sentía un gran dolor e impotencia pero callaba y pensaba tengo que hacer algo por ella! tengo que permitirle el derecho a la sonrisa y fue entonces cuando en su mas intima timidez dijo:
- Cual es tu sitio favorito? Tu esconderijo!? Pregunto el!
Ella respondio anhelando aquellos momentos en que se sentia dueña del mundo, cuando estava en aquel pequeño sitio.
- … tengo un sitio escondido donde solo puedo ir yo!
- Para pensar, analizar, tomar decisiones…
- Yo me escondo para sentir… para oír la calma… La Paz… Respondió ella! Y a seguir agrego.
- y usted debe tener un esconderijo también! Todos tenemos, Porque no va ese sitio? En vez de estar aquí un sábado!
- Porque no tengo compañía!... Agrego el…
… Ella sonrió! Pues sabia que era una invitación pero su timidez no le dejaba pedirlo de otra manera si no de aquella, a ella le divirtió la respuesta! El sintió que no debería de llegar tan lejos, que no debería, pero el quería...
- Si quiere, yo puedo hacerle compañía!? Respondió ella rápida y sonriente!
- Hoy no puedo, tengo que prepararme para la semana de clases… Pero el jueves tengo tiempo… Te parece!? El supo en ese momento que no debía! Pero la ciencia también siente…
Ella no podía creer lo que sus ojos veían, Era en serio lo de la invitación!? Ella iría encontrarse con el por primera vez! Estaba exaltada, feliz, la emoción se deshacía sobre la sonrisa y la estremecía!...
- Si, puede ser el jueves, Después de clases!?
- Si, entonces estamos de acuerdo! El jueves te espero.
Ella espero ese día como en su vida habría esperado nada igual, los nervios la dominaban, su corazón gritaba desesperado por ese día, pensaba de que hablarían!? Como sería estar con el Verdaderamente!?

Ese día, con su calma habitual, el menciono:
- Sígueme! Y ella así lo hizo.
Era un día de frío, el mar estaba agitado y las olas se quebraban a gran velocidad a la orilla, el sol se ocultaba muy despacio… Al fondo lograba verse un puente, de algunos metros.
y ella temblaba de miedo de aquel momento! El aire frió y mojado del mar le acariciaba las mejillas y le hacia suspirar, se sentía feliz… Distante…
La orilla estaba desierta! Tal como el mar a lo lejos. Pensaba
- Que soledad! Que paz….
Al final del puente se encontraba una playa desierta e inmensamente ancha! Sin infinito… como el sentimiento que ella sentía en aquel momento. Charlaron y se contaron infinidades de asuntos, rieron y por primera vez ella descubrió el color del mar en un día de otoño… Frió… Silencioso! El verde de sus ojos! El verde mar de unos ojos muy perfectos que jugaban con la intensidad de la luz a hacerse olivas castañas! Y fue feliz… Durante aquella tarde fue feliz.
Ya cerca de la despedida que la traería de nuevo al mundo real, hubo quien pidiera un abrazo, para celar con un gesto de cariño aquella bonita tarde que oscureció al sonido de las olas vivas e frías que reventaban a la orilla! El día estaba cada vez mas frió y mas oscuro y solo se veían las sombras de 2 cuerpos en la arena.
Surgió espontáneamente el abrazo mas calmo, cariñoso, y sincero que había recibido nunca antes y ella entre cortadas palabras dijo algo que el jamás olvidará.
- Yo ya conocia tu aroma desde siempre… yo ya sabia que este eras tu!
El no entendió lo que ella dijera, pero no quiso pensar sobre eso, quiso si! Disfrutar de la maravilla de un abrazo prolongado por mucho y muchos minutos.
En cuanto el abrazo silencioso demoraba la eternidad del amor. El alma de los 2 se entendían sin palabras y ella amo la ciencia y el a su propia alma….